viernes, 22 de junio de 2012

El verano de 1991

Cuando todo cambia y del vacío nace un eco...
Pensé que las oportunidades había que aprovecharlas,
Pensé que la avaricia a veces puede romper el saco,
Pensé que había que arriesgar y sacrificar cosas,
También pensé que a veces la culpa es del que se deja someter...
Pensé muchas cosas que iban modificando mis pensamientos.
Ahora, aquel verano de 1991 había pasado a la historia,
aquel verano que siempre sería recordado.
Miré al horizonte y sonreí, luego volví ha hacerlo y lloré.

Cobarde yo,yo no soy cobarde.
Cobarde fuiste tu al dejar que yo fuese tan cobarde,
y acorbardarte sin hacer aquello que hace mucho tiempo debiste,
Debimos hacer. Porque no debimos ser cobardes.
Pero no lo olvides, yo no soy cobarde.
Yo aun sigo arriesgando como se arriesgó aquel verano de 1991.

No hay comentarios:

Publicar un comentario