Te levantas, tras pasar una noche muy extraña en la que has necesitado leer para poder conciliar el sueño, para aprtar tu mente de tu vida real y llevarla a otra época y otro personaje. El día comienza como la mañana anterior, a penas unas cuatro horas de sueño y un despertar cansado y enredado en el nórdico que no quieres abandonar, está tan calentito...
Pie derecho al suelo, pie izuierdo y música para despertar la mente y sacarla de los sueños de esa noche extraña. Vestida en poco tiempo, con las cosas de clase preparadas, rumbo a vivir un día, un día raro.
Hoy no he tardado al elegir ropa, ni en maquillarme, ni en lavarme los dientes... Sólo he cepillado mi pelo y he puestao la crema necesaría para el día en mi bolso.
Bien, bien.
Caos.
Calma.
Calor.
¿Un escalofrío?psssss...s
Que cansada...
Empieza el cansancio hoy... mi cuerpo, y mi mente comienzan a querer estar inconscientes y a querer visitar sitios oníricos nuevos... No lo consigo.
Un té, las dos de la mañana... ¿otro té?
Me pican los ojos.
Tengo que descansar, descansar para mis sueños...
"No estés lejos de mí un sólo día, porque cómo, porque, no sé decírtelo, es largo el día, y te estaré esperando como en las estaciones cuando en alguna parte se durmieron los trenes. No te vayas por una hora porque entonces en esa hora se juntan las gotas del desvelo y tal vez todo el humo que anda buscando casa venga a matar aún mi corazón perdido." Pablo Neruda
miércoles, 5 de octubre de 2011
martes, 4 de octubre de 2011
una noche de RR
Si tú estuvieras aquí sería mas fácil...
Estas noches que no me dejan dormir, no me dejan relajar la mente, ni un cigarrillo me hace dejar de pensar que si estuvieses... si estuvieses todo sería algo más facil.
Si pudiera coger la guitarra y sacar melodías intocables, que los oidos de mi mundo se llenaran de miles de orgasmos musicales... eso estaría muy bien, pero desgraciadamente mi guitarra pequeña sigue en el armario y mis manos no se atreven a enfrentarla como a mi cabeza le gustaría.
17 días
Estas noches que no me dejan dormir, no me dejan relajar la mente, ni un cigarrillo me hace dejar de pensar que si estuvieses... si estuvieses todo sería algo más facil.
Si pudiera coger la guitarra y sacar melodías intocables, que los oidos de mi mundo se llenaran de miles de orgasmos musicales... eso estaría muy bien, pero desgraciadamente mi guitarra pequeña sigue en el armario y mis manos no se atreven a enfrentarla como a mi cabeza le gustaría.
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